Diputado José Alfonso Borja Pimentel - Muchas gracias presidente, con tu permiso, con el permiso de quienes integran esta Mesa Directiva y saludando con mucho gusto a las diputadas diputados, medios de comunicación, a todos quienes nos ven en las transmisiones a distancia y muy en especial hoy saludo a las alumnas y alumnos de la UTSOE Universidad del municipio de Valle de Santiago a quienes con muchísimo gusto recibimos en este Congreso del Estado bienvenidos y bienvenidas. - Muchas gracias y bueno pues, en fortalecimiento de la legislación a favor del acceso de las mujeres a una vida libre de violencia, obedece a la identificación de todas estas conductas que hemos estado realizando por generaciones, sin que muchas veces pudiéramos haber sido conscientes de ello, es decir, hemos ido visibilizando y reconociendo que efectivamente, la violencia se da y que es necesario que se nombre para establecer las acciones, a fin de prevenirla, atenderla, sancionarla y erradicarla, sabemos que aún falta mucho por hacer y por ello, desde el Grupo Parlamentario del PAN, seguimos impulsando temas que contribuyan a uno de los objetivos principales de la política de acceso de las mujeres a una vida libre de violencia su prevención. - Con la intención de sumar todos los esfuerzos posibles, en este tema tan importante, consideramos primordial el impulsar acciones muy concretas que no sólo tendrán el efecto a favor de las mujeres, sino también de los hombres y por lo tanto, de la sociedad en general, estamos buscando procurar, un tejido social donde mujeres y hombres, logremos condiciones de igualdad que conforme nuestra población de niñas, niños y adolescentes vayan creciendo, también vayan recibiendo educación, sobre cómo establecer relaciones positivas e igualitarias y que puedan vivir libres, de todo tipo de violencias, la apuesta es a favor de una sociedad, en la que el respeto de los derechos humanos de todas las personas, sea de conocimiento de la población, que estos derechos sean asimilados y formemos una nueva normalidad alejada de la violencia y la discriminación, sin demérito a todo lo que se ha logrado a favor de los derechos de las mujeres, consideramos que se requiere de toda la suma de esfuerzos posible, en donde sociedad y gobierno trabajen de la mano para fomentar las relaciones no violentas, positivas e igualitarias, a favor de los derechos de todas las personas. - Para lograr una reconstrucción del tejido social, el rediseño de conceptos tan arraigados de nuestra sociedad, la resignificación de las construcciones sociales, el ejercicio pleno del derecho a vivir libres de violencia, por supuesto que es necesario que sigamos proponiendo, que se establezcan nuevas atribuciones a las autoridades, para que en el ámbito de su competencia, contribuyan a la construcción de una sociedad no violenta. - Para ello, presentamos esta iniciativa que establece facultades, a las autoridades estatales, algo muy valioso, en materia de seguridad, en materia de educación y de la procuración de los derechos de las mujeres guanajuatenses, para que, implementen acciones muy concretas, dirigidas a la reeducación y reinserción social, de las personas agresoras y al diseño de la política integral para la prevención de los delitos contra las mujeres, tomando en consideración la promoción de las masculinidades positivas e igualitarias, diseñen y difundan materiales educativos que promuevan la prevención y atención de la violencia contra las mujeres, incluyendo la promoción y fomento de las masculinidades positivas e igualitarias y que en coordinación, entre autoridades del estado y los municipios, se diseñen y ofrezcan programas que brindan servicios reeducativos integrales, a las víctimas y a las personas agresoras, con la inclusión del concepto de masculinidades positivas e igualitarias, como otro elemento que se suma para la prevención de la violencia contra las mujeres, pretendemos que la sociedad pueda, contar con mayores elementos para identificar, reconocer, visibilizar y asimilar, que muchas de las conductas socialmente aceptadas, implican violencia contra las mujeres. - La población masculina, hemos sido formados de manera histórica, en un concepto que ha llegado a ser violento, pero esta violencia, no solo se ha materializado en la vulneración de los derechos de las mujeres, sino que también, ha afectado a los propios hombres, las masculinidades negativas también presionan a los hombres, a cualquier edad para que se comporten de una manera que es la socialmente aceptada, no nos es ajeno, el que la presión social es una carga muy importante en la conducta de las personas, y que por ello, muchas de las veces aunque una persona no esté convencida de hacer algo por encajar, por coincidir, por incluirse, por ser aceptada, realice algún acto que por sí misma no hubiera realizado, como ya lo he mencionado estas presiones sociales existen, tanto para mujeres, como para hombres. - Muchos de nosotros hemos escuchado expresiones que demeritan, el que los hombres tomemos participación activa en la crianza de nuestras hijas e hijos, el que realicemos tareas en el hogar, el que queramos ser unos padres involucrados en la vida, el crecimiento y el desarrollo de nuestras hijas e hijos o cuando nos pronunciamos a favor de dejar de ser esa figura paterna vista, solo como proveedora y como el logro cuando alguien se porta mal, como uno de muchos elementos para procurar la igualdad, debemos comenzar a dejar de considerar a todos los hombres, como personas violentas, como los únicos responsables de proveer lo necesario para el sustento de la familia, como aquellos que nunca darán una muestra de cariño a su familia, como los padres que solo sirven para regañar, como los que deben aguantar todo o inclusive, como los príncipes que rescatan a las mujeres indefensas. - Debemos transitar a considerar a los hombres como personas en igualdad, quienes queremos poder expresar nuestros sentimientos, sin ser discriminados, violentados o excluidos, quienes queremos rechazar la violencia como conducta socialmente impuesta, quienes queremos, que tanto mujeres como hombres, podamos vivir una vida libre de violencia, quienes no nos sintamos desplazados, por la reivindicación de los derechos que todo el tiempo les han pertenecido a las mujeres y que sí es posible, que podamos vivir en igualdad, tenemos pleno convencimiento de que si se atiende a este sector de la población, para que también puedan hacer frente a estas construcciones sociales que le han vuelto violento y limitan el ejercicio de sus derechos, podremos ir avanzando en la conformación de una sociedad más igualitaria, donde la violencia no tenga cabida y sea verdaderamente rechazada, así como que este tema también ayudará, a que los hombres podamos encontrar espacios de coincidencia con muchos otros, que no hemos identificado, pero con los que coincidimos en que la vida en violencia no es la correcta, que puede ejercerse la masculinidad de manera positiva e igualitaria, donde lo que prevalece es la aceptación y el respeto y que por ello no somos más o menos hombres que los demás. - Con lo que se podrá fomentar, la educación y una convivencia sana libre de violencia, libre de señalamientos, como espacio seguro, donde los ejemplos a seguir sean positivos y contribuyen a la formación de las futuras generaciones en condiciones de igualdad, porque es derecho de todas las personas el poder vivir en igualdad en una sociedad sin violencia, en la que los hombres también puedan ejercer su paternidad de forma responsable y corresponsable, es que proponemos la presente iniciativa, con una invitación a sumarse en su momento a su aprobación, que tenemos la certeza no tendrá otra repercusión que no sea el beneficio de la sociedad guanajuatense. - Muchas gracias es cuanto Presidente.